Saliendo del clóset como señora: Mi recomendación de Las Aparicio

Posted on 16 septiembre, 2019 Actualizado enn 16 septiembre, 2019

Es muy cierto el título, y créanlo, les voy a recomendar una novela mexicana y eso nomás por ser día festivo: Las Aparicio, producción de Cadena 3 y que salió así casi 10 años. ¿Pero por qué voy a pedirles que vean una novela de señoras? Porque para el tiempo en que salió (incluso actualmente) es bastante revolucionaria.

Algo que odio de las novelas (mexicanas en específico) es que siempre nos cuentan la misma historia sin importar qué pequeñas variaciones le hagan y que SIEMPRE están los mismos detalles machistas de hace años. La pobre morra que se casa con el vato con un chingo de varo y una pretendiente, hay drama, siguiente escena: vivieron felices para siempre. Pero, como dije en un principio, Las Aparicio luchó contra varios de esos clichés y tenemos la historia de mujeres exitosas por sus méritos y hablándonos de temas como el feminismo, la violencia y el poliamor, entre otros.

La historia se puede resumir en las siguientes líneas: Las Aparicio es una familia conformada solamente por mujeres que buscan la felicidad. Por alguna razón, entre ellas no se dan los hijos hombres y los esposos mueren por casualidad.

Tenemos a la matriarca, Rafaela, quien enviudó tres veces; Alma, que es la hija mayor tiene un centro cultural en el que imparte talleres de sexualidad sana, feminismo y otros y que esconde un secreto detrás de ese edificio; tiene una hija llamada Iliana que está en contra de todo lo que su madre hace. Mercedes, la sándwich, es abogada y siempre escoge los casos que sus compañeros rechazarían, lo que la lleva a trabajar con diversas personas que se salen de lo convencional; tiene una hija llamada Isadora. La hermana menor es Julia, quien está en un proceso de definir lo que quiere en la vida, puesto que nunca es capaz de elegir al cien, lo que la lleva a tener problemas en sus relaciones y a una larga búsqueda de trabajo. Otros personajes secundarios serían Aurelia, quien es la nana de todas y a veces sólo está para la comedia y Mariana, amiga de Julia, al principio de la serie, la Aparicio no puede definir si sólo la quiere como tal o si siente una atracción sexual hacia ella.

En los siguientes capítulos se van a aparecer algunos hombres, quienes, como tal vez es predecible, tienen un interés por alguna de las mujeres Aparicio, entre ellos Claudio (socio del bufet de abogados donde trabaja Mercedes), Leonardo y Alejandro (uno, compañero sexual de una noche de Alma, el otro, empleado de ella), y Armando pareja de Julia quien siempre le está poniendo el cuerno.

Sinceramente hasta ahí parece bastante común, pero si algo tiene esta serie es que no todo es lo que parece. Para empezar (en el primer capítulo) se nos presenta que Alma detrás de su centro cultural tiene un servicio de escorts masculinos (tres hombres metidos por su voluntad al trabajo, tentados por lo bien que suena la idea de sexar a cambio de dinero y mantenerse así) cuya finalidad no es la de cualquier burdel, sino con ayuda de terapia sexual trabajar con mujeres con diversos problemas o traumas que les impiden disfrutar de una sexualidad plena, lo que nos lleva a cuestionamientos sobre la moral y casos en que las pacientes han sufrido de violencia sexual, represión y abandonamiento, entre otros.

En este mismo escenario, aprendemos. No es solamente mencionar que existe el Atelier y olvidarnos de él para favorecer los encuentros entre las pacientes y los escorts, sino que mediante escenas en las que Alma da sus clases, se nos imparte información sobre los temas que ella misma está trabajando con sus clientas y que a veces se relacionan con los casos que Mercedes lleva. A veces se tocan temas de sexualidad, consentimiento, responsabilidad emocional, y otras ocasiones, nos hablan de orientaciones sexuales, identidad de género, dependencia y así.

Por otro lado, también nos hablan mucho sobre el feminismo y el afán que tienen las hermanas de poner en igualdad y equidad a las mujeres frente a los hombres; esto se ve especialmente con Mercedes, cuyos compañeros de trabajo le hacen menos por su género y porque venía de ser ama de casa, y su secretaria, Diana, una mujer que en un principio se vestía llamativa para los hombres porque era lo que tenía que hacer  y no porque quisiera y que funcionaba básicamente como eye candy para sus jefes.

Y con Julia tenemos un largo recorrido sobre la definición de la sexualidad y su proceso de aceptación. Mariana, quien es su mejor amiga desde niña, es lesbiana, y ambas han presenciado sus respectivos triunfos y fracasos amorosos, mientras comparten su búsqueda por un trabajo que les llene (ambas empiezan con un pequeño servicio de comida). Con ellas dos se nos habla de los problemas que la comunidad LGTTBIQA+ tiene para vivir en paz, empezando por la homofobia de parte de cercanos y la sociedad, y procesos legales en temas como papeles de identidad, adopción y matrimonio. Punto a resaltar de ellas: Son personajes gays fuera del estereotipo, porque acéptemoslo, el gay típico es hombre blanco y con pluma (que no tiene nada de malo, pero siempre se ocupa como burla), o en el caso de las lesbianas: machorra.

PUNTOS BUENOS

Los personajes.

Ya hablé en líneas generales de los personajes, lo que quiero mencionar de ellos (de todos) es su realismo que tienen. Ningún personaje es perfecto: se nos presentan humanos y con fallas, especialmente cuando se trata de reconocer de sus carencias o demasiado conscientes de ellas, lo que a veces les impide tener relaciones sanas o presentar un crecimiento.  Como es una novela esperaríamos la presencia de buenos y malos, pero aquí no los hay porque no son necesarios. O sea, probablemente los únicos malos serían los clientes de Mercedes y a veces los esposos de las clientas de Alma, pero realmente la mayoría no son malos-malos, sino conservadores demasiado cerrados. Y luego tenemos al personaje de Ileana, que es bastante insufrible.

Los actores son buenísimos y tienen una química increíble. No sólo en los que hay tensión sexual, sino en la familia Aparicio: Gabriela (Alma) y Ximena (Mercedes) sí me las creo como hermanas, especialmente cuando están con Liz (Julia) y se encargan de bullearla o aconsejarla.

El uso de privilegios

Las Aparicio son gente de clase alta y con contactos, lo que no es de extrañar en las telenovelas, están relativamente bien acomodadas y tienen una casona. Por el trabajo de Mercedes, a veces tienen que acoger mujeres que necesitan refugio, ya sea porque están escapando de alguien, se quedan sin hogar, o simplemente requieren de alguien que las apoye.

Pero no solamente es brindarles una casa, las Aparicio en su posición ocupan esos privilegios para ayudar a sus clientas y conocidas. Tienen relativa voz y poder, así que ellas a lo largo de varios capítulos acompañan a quienes carecen de ello para que se les escuche, y no para hablar por ellas, sino para acercarlas a los que realmente tienen el poder. Lo que también habla de que no buscan robarse sus luchas y sus méritos.

La sexualidad sana y responsable

Probablemente ya lo mencioné muchísimas veces, pero en una serie donde las protagonistas son varias mujeres, en otras partes ya tendríamos a varias juzgándolas por la manera en que se comportan sexualmente. Se habla sin tapujos de los one night stands, de usar protección (esto posible gracias al patrocinio de Sico) y la necesidad de consultar profesionales como ginecólogos, terapeutas, psicólogos y hacerse estudios pertinentes para ETS y mastografías.

También en esta parte se habla sobre conocerse, analizar conductas que pueden interpretarse como banderas rojas,  comunicación y aprender a reconocer problemas con la sexualidad derivados (entre ellos, la anorgasmia y la frigidez) de traumas como abuso (y no sólo en mujeres), o por la simple reducción que se ha hecho de la sexualidad femenina y su papel dentro del matrimonio.

Igualmente me gustaría mencionar sobre la prostitución que en esta serie está ejercida por los hombres que trabajan para Alma y que dista mucho de lo que habitualmente conocemos sobre la prostitución forzada y tristemente, bastante común en nuestro país. Acá ellos deciden por diversas razones que es un trabajo que les conviene y que realizan no para complacer mujeres, sino para ayudarlas a que ellas tengan el poder de su sexualidad y la desarrollen como ellas quieren y no como habitualmente les dicen debe ser.

Temáticas sociales reales y cercanas al televidente

De pronto, la mayor catástrofe que pasa en las novelas comunes es algún evento de fraude o desfalco, pero aquí, realmente se atrevieron a hablar de discriminación, de la violencia sistemática hacia la mujer, desapariciones forzadas, trata de personas y la ILE (que para ese momento -2010-  llevaba apenas 3 años de ser aprobada).

No todos los hombres son iguales

Esto me parece importantísimo de mencionar, porque seguramente esperaban que los hombres que aparecieran se retrataran como imbéciles o patanes. Cuando uno entra al feminismo se da cuenta que la culpa de esta homogeneidad es porque el sistema se sigue perpetuando y los padres les dicen a los hijos que deben seguir siendo como son porque «así son los hombres» (e inconscientemente continuar beneficiándose del pase libre que tienen).

Pues en esta serie tenemos cuatro hombres principales que son diversos (después se agregan más), y cada uno peca en mayor o menor medida de tratar a las mujeres como quiere. El caso más evidente es el de Claudio, que comienza siendo sexista, pero a lo largo de la serie sufre cambios importantes; pero hay otros que lo hacen más discretos como Leonardo, uno de los intereses de Alma, que aparentemente la respeta, pero en contraste, a su ayudante Mara la puede ver por encima del hombro sin importar la razón que tenga. Y en el caso de Armando (el novio de Julia) que las ocupa como muñecas hinchables tendrá que pasar por un proceso más drástico que el de Claudio para darse cuenta de su comportamiento y realmente hacer algo.

PUNTOS MALOS

La duración

Si están acostumbrados a las series cortas, va a ser un problema terminarla. Con 120 capítulos de 45 minutos aproximadamente, si está difícil de maratonear.

El personaje de Iliana

Creo que en serio debo mencionarla. Es la hija de Alma y regresa de Estados Unidos luego de que la corrieran de la escuela; por alguna razón, ha adoptado una forma de vida bastante pura y apretada ante los ojos de su familia. Incluso ha decidido hacer un voto de castidad y usar un anillo con la promesa de no tener relaciones ni sucumbir ante el amor porque .para ella- es una trampa que enloquece y condena y no hace ningún bien.

Si bien sus familiares en un principio lo toman como algo de la edad, lo toleran y lo respetan, sin embargo, este comportamiento hace que las cosas se pongan tensas y que llegue no sólo a juzgarlas por el tipo de vida que llevan sino a ser realmente severa y grosera, incluso apodándolas como Las Poquianchis y sin bajarlas de putas. Y las cosas tampoco se ponen mejor cuando se entera de la orientación de Mariana, a quien le dice que  ve con asco.

Hay que reconocerle el trabajo a Paulina Gaitán por su actuación, porque sin duda logró transmitirnos a la muchacha odiosa que llega a ser.

La película

Realmente no tendría que mencionarla, pero lo haré de cualquier forma. Se desarrolló en 2015 (luego de no poder consagrar la idea de una segunda parte de la serie) una película con el mismo nombre que evidentemente se quedó corta y que ni siquiera repite enteramente al reparto, entonces ¿Para qué verla si no ayuda para nada al legado de la serie?

Conclusiones

Ya que es una entrada bastante larga, diré como puntos finales que por favor la vean si es que disponen del tiempo. Es una novela que sin duda recomiendo (la otra es Para Volver a Amar -Adaptada de una novela colombiana) y que me permitió aprender una que otra cosa que no sabía. Igualmente me parece necesario que tenga difusión porque toca muchos temas distintos e importantes que deberían hablarse con mayor naturalidad o constancia para generar una crítica sobre la sociedad en la que todavía vivimos (porque, incluso a casi diez años de su transmisión, en la mayoría de los temas seguimos en las mismas).

Pueden encontrarla completa en Netflix.